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Shalom, nos acercamos al momento de inicio de Yom Kipur, el día más sagrado del calendario. Dicen nuestros sabios que lo mejor es presentarse ante Hashem con la sensación de ser «guerim que se acaban de convertir», de esa manera.
Os proponemos el comentario del Rabino Ginzburgh acerca del trabajo espiritual de Kipur, basado en la parashá que leeremos, Ajare Mot.
A. La Rectificación del Atrevimiento o el Ímpetu
En la Torá se resalta la conexión de Iom Kipur y la muerte de los dos hijos de Aarón, Nadav y Avihu. Partiendo del hecho de que el trabajo de Iom Kipur está escrito en la parashá “después de la muerte” que comienza relatando la muerte de los hijos de Aarón. Veremos que en los sacrificios de este día hay una alusión a los dos hijos de Aharón, en los dos machos cabríos [שעיר העזים , seir haeizim] uno para Hashem y el otro para Azazel, עזאזל . Nadav y Avihú se equivocaron en un arrebato sin respaldo suficiente, con un atrevimiento o arrojo [עזות , azut] fuera de lugar. El macho cabrío simboliza al atrevimiento [en especial de los machos cabríos jóvenes, zeirim tzeirim], y el concepto de Azazel.
En el acto de Nadav y Abihu está dicho “y ofrendaron ante Hashem un fuego extraño que no les fue ordenado”. Se debe determinar si su impulso era todo de la santidad o estaba involucrado resabios del ego inadecuado, quizás el “no [el lado negativo]» es que «les fue ordenado”! La rectificación es através del servicio de los dos cabríos en Iom Kipur: hay que reconocer que hay en nosotros resabios de egísmo, y arrojarlos a azazel, el lugar de la bravura ilegítima, y así se refina la bravura correcta, “la bravura sagrada”, azut dekedushá”, que por su poder se puede llegar a la santidad interior y salir en paz.
b. Rectificación de la impulsividad
Las dos cabras de Iom Kipur provienen de los fondos públicos («de la comunidad de los hijos de Israel»), como toda ofrenda pública, y además la comunidad trae un carnero para la ofrenda de holocausto. Además, Aarón el Sumo Sacerdote trae por sí mismo (y así el Sumo Sacerdote a continuación en cada generación) un buey por el pecado y un carnero por holocausto. Sobre el buey se confiesa el Sumo sacerdote primero por sus pecados y los pecados de su familia, y luego por los pecados de todos los sacerdotes, de aquí que este buey esté relacionado con la reparación del pecado del propio Aharón el sacerdote por el pecado del Becerro de Oro (el becerro creció y se transform en buey).
El Pecado del becerro de Oro es el pecado de la falta de paciencia y de buscar una sensación inmediata y superficial. En esto se puede ver la raíz de todos los pecados, porque el pecado del Árbol del Conocimiento provino de motivos similares.
C. Rectificación de la Pereza
En el servicio de Iom Kipur se destaca la presencia de la esposa del sacerdote en el fondo, como está escrito: «y expió por sí mismo y por su casa”, y está dicho “su casa es su esposa”. Y así establece la halajá que el servicio del Sumo sacerdote es casher sólo si está casado. En los sacrificios de este día, el carnero que trae el sumo sacerdote en holocausto apunta también a la rectificación de su esposa. Las dos clases de sacrificios principales son por el pecado [jatat] y el holocausto [olá]. Por el pecado viene a limpiar o depurar [lajtó] la trasgresión que se hicieron de los preceptos negativos, en cambio el holocausto viene a expiar por los preceptos positivos, o sea los que se tendrían que haber hecho y no se hicieron.
La ofrenda por el pecado corresponde más bien al hombre, más activo y dinámico y tiene que expiar por las acciones negativas, y el holocausto se relaciona más con la mujer, quien tiene que expiar por la pasividad negativa. La mujer tiene que ser “ama de casa”, o como insinúa este año “lo principal de la casa”, akeret habait, iniciar y actuar para que la casa judía, la relación matrimonial y toda la familia, sean puras y sagradas, como “la mujer virtuosa” del libro de Proverbios, “y el pan de la pereza no comerá”. Aludida en especial en la esposa de Aharón el sacertote, אלישבע בת עמינדב , Elisheba bat Aminadav, cuyas primeras letras son איל .
D. «Trata de ser un hombre»
El carnero para el holocausto ofrecido por la comunidad alude a los dos hijos restantes de Aarón, Eleazar e Itamar. Naturalmente, Nadav y Avihu ameritaron el gran sacerdocio, pero después que murieron el sumo sacerdocio pasó a Elazar, y en las siguientes generaciones se alternaron entre los hijos de Elazar y los hijos de Itamar. Los hijos más jóvenes suelen temer tomar el lugar de los mayores y conducir a la comunidad, por eso la comunidad trae unאיל לעולה , un carnero para el holocausto, para animar a los hijos de Elisheba a cumplir la orden de “[donde no hay hombres] trata de ser un hombre”, levantarse y liderar a la comunidad y no disminuirse con una falsa modestia.