Ver, dar tzedakah, confesarse. Parashat Itro

B»HBITSELA-17Yitro

Shalom compañeros de estudio. Bienvenidos al estudio semanal de la parasha.

וַיִּשְׁמַע יִתְרוֹ כֹהֵן מִדְיָן חֹתֵן משֶׁה אֵת כָּל אֲשֶׁר עָשָׂה אֱלֹהִים לְמשֶׁה וּלְיִשְׂרָאֵל עַמּוֹ כִּי הוֹצִיא יְהוָֹה אֶת יִשְׂרָאֵל מִמִּצְרָיִם
El suegro de Moshé, Itró, sheik de Midián, oyó acerca de todo lo que Dios había hecho por Moshé y Su pueblo Israel cuando sacó a Israel de Egipto (shemot 18:1)

Dijeron los sabios, que ha oido itro?

Rabi Elazar dijo: Ha oído la guerra de Amalek, y vino.

Rabi Elazar dijo: Ha oido La recepción de la Torah, y vino.

Rabi Eliezer dijo, Ha oido la separacion del mar, y vino.

Si el cruce del mar ha sido el difícil parto de nuestro pueblo, entonces, en esta fase, el pueblo de Israel ya aprende caminar solo. Sin embargo, todavía no ha adquirido su lenguaje. Esta sera nuestra Torah que se dará al final de nuestra parasha. Una inmensa bendición se junta con una gran obligación se transmite sin intermediario, directamente al pueblo asustado.

וְכָל הָעָם רֹאִים אֶת הַקּוֹלֹת וְאֶת הַלַּפִּידִם וְאֵת קוֹל הַשֹּׁפָר וְאֶת הָהָר עָשֵׁן וַיַּרְא הָעָם וַיָּנֻעוּ וַיַּעַמְדוּ מֵרָחֹק
Todo el pueblo veía los sonidos, las llamas, el toque del cuerno de carnero y la montaña que humeaba. El pueblo se estremeció al verlo, manteniéndose a distancia.(shemot 20:15)

Para consultar la Parasha en castellano y en hebreo, podéis acceder al siguiente enlace.

La oracion de la mañana, dada en el desierto de sinai.

La oración de la mañana, de «shajrit», dada en el desierto de sinai.

Miremos el vídeo semanal que se dedica a la parasha. El Rav no habla directamente de lo que estamos leyendo, sino que explica los tres componentes que hay que conseguir hacer cuando se encuentra con una persona justa, con un Tzadik (o sea, en un encuentro con el pueblo con moshe rabenu tal como se menciona al principio de nuestra parasha…)

Las tres cosas que hay que cumplir son: Ver el tzadik, realizar una Donacion (tzedakah), y Confesarse (vidui)

Nuestro rabino explica estas tres acciones en el siguiente vídeo

Shabat Shalom a tod@s.

Lightletter y el equipo de OrEinSof

como un árbol a las orilla del rio | tu bishvát

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Deseamos dedicar este articulo a esta fiesta tan bonita tu bishvat, la fiesta de los arboles, que acoge en su seno a todas las creaciones de hashém, a los que sin duda debemos nuestra existencia.

Deseamos a todos buena fiesta de Tu Bishvát, y fructifera lectura.

Tu B’Shevat

Nos enseña el Sefer Ietzirá que Di-s creó el mes de Shevat a través del canal divino de la letra tzadik. Esta palabra significa el «justo«, de quien está dicho: «El justo es es fundamento del mundo», y en cada generación hay una persona que es el «justo de la generación». El mes de shevát el tiempo más apropiado para que cada uno de nosotros manifieste su chispa de tzadik, fortaleciendo su conección consciente con el tzadik de la generación.

arbol

La letra tevet, del mes anterior, es la ain; cuando se conecta con la letra de este mes forman la palabra etz (árbol). Esto refuerza la idea, enseñada en jasidut, de que estos meses se corresponden respectivamente con el árbol del conocimiento y el árbol de la vida. El poder espiritual de tevet, bitul o auto anulación, intenta ayudarnos a rectificar el estado de autoconciencia que proviene del hecho de que Adam y Eva hayan comido del árbol del conocimiento, provocando la caída primordial de toda la humanidad. El poder espiritual de shevat, taanug o placer, intenta despertar nuestro deseo por el fruto del árbol de la vida, que tiene el poder de transformar la amarga oscuridad de la mortalidad que se produjo después de comer del árbol del conocimiento, en una dulce luz de vida eterna que se pretendía para el hombre en el momento de su creación.

El árbol de la vida, que expresa el potencial de restaurar la perfección en toda la realidad, aparece en las fuentes judía como un símbolo del «tzadik fundamento del mundo» y de la Torá, en especial su dimensión interior, la tradición esotérica. De esta manera, cuando nos concentramos en injertarnos en el árbol de la vida, el mes de shevat es un tiempo especialmente importante para apegarse al tzadik mediante el sendero de la «dulce» Torá que emana de su boca. Por esta razón encontramos que fue durante este mes que los hijos de Israel escucharon la recapitulación de la Torá por parte de Moisés, como está registrado en el libro Deuteronomio (Mishná Torá).

El justo es considerado como el Moisés de cada generación, anima nuestra alma al conectarnos a más y más profundos senderos de «la Torá de Vida», inspirándonos continuamente a diseminar la luz de Di-s en el mundo por medio de buenas acciones y compartiendo la sabiduría de la Torá con la que hemos sido bendecidos.

Tu B’Shevat, el 15 de shevat, es conmemorado en la tradición judía como una festividad especial, el «Año Nuevo del Arbol». Es el día en que se determina el diezmo que va a ser tomado de los frutos recién formados del árbol, porque se presume que en esta fecha ya ha caído la mayoría de las lluvias anuales. Este día celebramos el despertar de la vida, la que savia sube de las raíces y lleva las bendiciones y energía de la tierra a las ramas donde se forma el fruto.

Hay dos opiniones entre los sabios acerca de qué día de shevat es el año nuevo del árbol. La «casa de Shamai» sostiene que es el primero, el día de la luna nueva, mientras que la «casa de Hillel» sostiene que es el 15, el de la luna llena. Estas dos fechas corresponden a los dos estados del tzadik: el primero representa al tzadik como existe en un estado de «ocultamiento», mientras que el 15 representa al tzadik cuando está completamente revelado. Esta distinción concuerda con la percepción general que la «Casa de Shamai» decide de acuerdo con el estado potencial de la cosa, mientras que la de Hillel de acuerdo con su estado «actual».

La Mishná se refiere a Tu B’Shevat como el año nuevo «del árbol» (en contraposición con la forma común «de los árboles»), aludiendo a la especial conexión entre esta fecha y «el Arbol [quintaesencial] de la Creación», el «Arbol de la Vida».

Compuesto por raíces, tronco, ramas y fruto, el árbol es visto en cabalá como una metáfora del proceso por el cual la luz y energía Divinas son canalizados dentro de la Creación. Meditemos ahora acerca de los distintos componetes de la metáfora:

Las raíces representan el poder del alma del tzadik, que mientras absorbe y proyecta la fuerza invisible de vida Divina subyacente en la Creación y sirve como un modelo de servicio Divino, su esencia (o raíz del alma) permanece completamente oculta, como las raíces del árbol.

El tzadik es conciente de estos dos modos de existencia, por lo que es capaz de existir concientemente «dentro y fuera del mundo» como uno y al mismo tiempo.

 

BSHEM1Se dice del Baal Shem Tov, el fundador del jasidismo, que perfeccionó su estado paradójico de conciencia más que cualquier otro tzadik antes que él. Fue capaz de aferrarse concientemente a la luz infinita y trascendente de Di-s, mientras que al mismo tiempo dirijía una conversación aparentemente mundana con su semejante judío. Esto lo habilitó a atraer dentro de la Creación una medida ilimitada de influjo desde una realidad totalmente «más allá» de la Creación misma.

El tronco representa la sabiduría de la Torá como es revelada en cada generación por cada tzadik en particular. La Torá es el medio esencial por el cual la fuerza de vida es llevada a las varias ramas de la Cración. Los anillos concéntricos del tronco representan los multiples niveles de interpretación de la Torá, alineándose desde el centro interno de la tradición mística hasta las capas exteriores de la ley y las costumbres.

Las ramas del árbol representan a aquellos sirvientes de Di-s humildes y amantes, imbuidos por el espíritu expansivo del jasidut, que siempre buscan alcanzar y abarcar el resto de la Creación. Aunque su conección conciente es la sabiduría de la Torá que les reveló el tzadik, la fuerza que les permite «producir frutos» deriva realmente de su raíz espiritual oculta, enclavada en el sustrato Divino de la realidad.

El fruto representa las buenas acciones realizadas por estos individuos en su deseo de beneficiar a la Creación, los actos benevolencia infundidos del sabor innato de cada alma.

En Tu B’Shevat nos conectamos con esta metáfora del árbol, en la medida que experimentamos una renovada oleada de energía creativa proveniente de las raíces de nuestro ser, que nos inspira a dedicarnos al servicio activo de Di-s, cumplir Su propósito en la Creación.

 

Asimismo, Compañeros y compañeras, podemos recibir de la infinita sabiduria de ashém a través de sus creaciones, los arboles de la tierra.

Feliz tu bishvát a todos. Desde el equipo de OrEinSof

Especial | Conexión beJukotai ~ Lag baÓmer

בס”ד

La Kabaláh enseña que el día en que el tzadik (justo) desaparece de este mundo, ese día del año se revela la esencia de su alma.

Lag baÓmer, literalmente el día 33 de [la cuenta] del Ómer, fue el día de la desaparición de Rabí Shimón bar Yojay, el autor del Zohar.

Este día, cuando la esencia de su alma fue revelada, es considerado el día de la entrega de la Dimensión Interior de la Toráh.

Lag baÓmer usualmente cae en la semana que se lee la porción de la Toráh beJukotay. No ha ocurrido este año, pero igualmente queríamos compartir con vosotros que esta incidencia, señala claramente que ambos están conectados.

beJukotay es la parasháh número 33 de la Toráh, y además el primer versículo tiene 33 letras.

Más aún, el valor numérico de las dos primeras palabras de la parasháh, «im beJukotay« es igual a 561, que es el triángulo* de 33. Esta operación matemática se relaciona con el secreto de la cuenta del ómer. El triángulo del día que se está contando está sugerido en la redacción de la frase al contar:

No decimos hoy es el primero, segundo o tercer día del omer; sino «hoy es un día del omer, hoy es dos días, etc.».

Este fraseo toma en cuenta los números de los días anteriores, creando un triángulo de cada día del ómer.

[*] el triángulo de un número es la suma de todos los números desde 1 hasta el número en cuestión, en este caso: 1 más 2 más 3 etc. hasta 33 = 561

Especial | Los Nombres de HaShem

בס”ד

Once Nombres Sagrados de HaShem
asociados con las Sefirot

HaShem creó el mundo a través de la palabra. Cada objeto y criatura del universo tiene un nombre a través del cual es hecho existir. Con las 22 letras del alfabeto hebreo se forman palabras. La combinación de letras dan su energía especial a cada palabra para que cada parte de la creación tenga sus propias cualidades.

Como fuimos creados a imagen y semejanza de HaShem, también nosotros damos vida o creamos cosas materiales y espirituales a través de la palabra. De ahí la importancia de cuidarnos de las cosas que decimos, pués aunque no nos demos cuenta estamos utilizando el poder de HaShem, que crea y da vida.

Esto se potencia de manera dramática cuando se trata de los Nombres de HaShem.

Cada uno tiene sus cualidades y poderes que sólo los grandes tzadikim conocen y pueden dominar.

Algunos se pueden pronunciar al estudiar Toráh, al bendecir o al rezar. Pero de todas maneras debemos cuidarnos muy bien de no pronunciarlos vanamente o con propósitos destructivos o egoístas.

Tampoco se pueden borrar ni tirar como desperdicios los papeles u objetos donde se haya escrito alguno de esos nombres. Para deshacerse de ellos, deben ser enterrados de acuerdo con la ley judía.

Este es el motivo de que no pongamos aquí la verdadera pronunciación de estos nombres, sino simplemente la palabra o «apodo» con que son conocidos.

Nombre de D~os       Asociado con la/s sefirá/ot…
Havayiá

Jojmáh y Tiféret

Ekié

Kéter y bináh

Ka

Jojmáh

Kel

Jésed

Eloka

Jésed

Elokim

Guevuráh

Tzevakot

Nétzaj y Hod

Shakai

Yésod

Adnut

Maljut

Akva

Lado derecho de Daat, o Yésod

Ehevi

Lado izquierdo de Daat

Sección Consultas | ¿Auténtica Kabaláh?

בס”ד

¿Cómo puedo saber si la fuente de Kalabáh que estoy estudiando es auténtica?

Estimado lector,

El verdadero estudio de la Kabaláh es el estudio de cómo me vuelvo más cercano a D-os y emular Sus atributos Divinos. En el estudio apropiado de la Kabaláh y Jasidut, uno debe tratar de apreciar e identificarse con la humildad y la modestia en presencia de D-os.

Si la persona o institución que propone enseñar Kabaláh le dice que tiene poderes espirituales inusuales, o le promete poderes espirituales, ése es el primer signo de que esa fuente no es auténtica Kabaláh.

El estudio de la Kabaláh para tener una experiencia es un tema cuestionable.

Uno debe sopesar honestamente si está buscando a D-os (la experiencia del desinterés y la entrega) o si desea una experiencia que proviene de su ego.

La diferenciación básica entre la Kabaláh auténtica y la no auténtica es cómo está representada: o bien como cosas, o bien como humildad en presencia de D-os.

D.os creó nuestro mundo con amor. Es Su deseo que nos rectifiquemos y retornemos a Él con amor, sin juicios severos, D-os no lo permita.

Si una persona o institución trata de manipularךe con amenazas de castigos severos en este mundo o en el mundo por venir, este es otra pista de que la fuente no es auténtica Kabaláh.

La mitzváh (“precepto”) de la caridad es considerada la mitzváh general de la Toráh y es fundamental en el judaísmo. Este precepto incluye dar directamente al necesitado, como así también apoyar a organizaciones que ayudan a otros material y espiritualmente. Al donar a dichas causas nos da el mérito de participar en las buenas acciones y objetivos de la organización. En muchos círculos es una costumbre dar caridad cuando se consulta a un tzadik, un justo. Un verdadero tzadik o una auténtica organización no se relacionarán con una persona de acuerdo al monto de su donación o la ausencia de ella. Aceptarán a cada persona con paciencia y bondad, con un deseo verdadero de ayudar a los demás.

La auténtica Kabaláי en nuestra generación comienza necesariamente con pensamientos y profundas comprensiones del Jasidut. A través del estudio de Jasidut, se despierta y revela el deseo innato del alma judía de acercarse y ser uno con D-os.

Toda curación y bendición proviene exclusivamente de esto y de nada más.

Sefirot | Emanaciones Divinas (12) Reinado

בס”ד

En la entrega anterior:

Correspondiendo con el órgano reproductivo en el hombre, yesod es el fundamento de las generaciones por venir. El poder de procrear, es la manifestación del infinto dentro del contexto finito de la criatura llamada ser humano. Cada hombre individual, es “pequeño” respecto de todas las generaciones que vendrán (de él).

Si nos visitas por primera vez o te has perdido algún capítulo, puedes recuperar la colección completa de artículos aquí.

Maljut es la última de las diez sefirot, y el atributo emotivo final dentro de la Creación (o más precisamente, el poder de expresar los pensamientos y emociones propios a los demás).

Aparece en la configuración de las sefirot en la base del eje central, directamente debajo de yesod, y corresponde en el tzélem Elokim a la «corona» del órgano de la reproducción (corona en el hombre; labia en la mujer), o a la bocaMaljut está asociado en el alma con el poder de autoexpresión.

La Kabaláh identifica tres «vestimentas» básicas (levushim) del alma, las cuales le permiten expresarse:

  • pensamiento (majshaváh), con el que el alma se revela interiormente;
  • habla (dibur) y
  • acción (maaséh), con los que se revela hacia el exterior.

Maljut como un todo, es llamado a menudo «el mundo del habla», de momento que la palabra hablada representa el medio esencial de autoexpresión, permitiéndole a uno no sólamente revelarse a si mismo a la realidad exterior, sino también guiarla e influenciarla. Por otra parte, el habla le permite a uno ejercitar autoridad y «realeza», el significado literal de maljut.

Maljut, sirve también como un instrumento para establecer una identificación con la realidad exterior.

Ejercitar realeza, requiere una extrema sensibilidad hacia las necesidades del reino que uno trata de regir. Por lo tanto, maljut requiere que todo agente de influencia dentro de la Creación asuma una postura receptiva con respecto a la fuente Divina de la autoridad, como el único camino de asegurar el bienestar definitivo del reino mundano.

Al meditar acerca de la Divinidad, el alma sólo puede percibir y ascender a las sefirot superiores a través de la «ventana» o portal de maljut. «Este es el pórtico hacia Di-s, los justos van a entrar a través de él» (Tehilim 118:20). En el servicio devoto del individuo a Di-s, esto significa recibir sobre si mismo, bajo total compromiso, «el yugo del reino de los cielos«.

Maljut = 496, que es la suma de todos los números desde el 1 hasta 31. Sumado a que es un «triángulo» (como fue descrito anteriormente, respecto de las sefirot tiferet y hod), 496 es un número perfecto (un número que equivale a la suma de todos sus divisores. Los primeros cuatro «números perfectos» son 1, 6, 28, 496). De esta manera, las diez sefirot finalizan (llegan a su consumación) con un número perfecto.

La unión de las últimas sefirot, yesod (80) y maljut (496) = 576 = 242.

El principio, la continaución y el final de las sefirot (todas a lo largo del eje central), kéter (620)tiféret (1.081), y maljut (496) = 2.197 = 133.

La sefiráh de maljut se desarrolla para formar el partzuf de Nukva deZeir Anpín [1]. Comenzando como un punto únicoNukva deZeir Anpín recibe todas sus sefirot superiores desde los niveles individuales de maljut contenidos dentro de cada una de las sefirot superiores (maljut de jojmáh pasa a ser jojmá de maljut, etc.).

El estado espiritual identificado en el jasidismo como correspondiente a la sefiráh de maljut es la de shiflut (humildad).

FIN

[1]  Es el partzuf que se desarrolla desde el punto inicial de la sefiráh de maljut en el mundo de Atzilut [2], recibiendo su energía Divina por intermedio de su contraparte, Zeir Anpín. En el alma corresponde a las distintas formas de expresión, que primariamente es el poder del habla, razón por la cual es conocido como «el mundo del habla», o en general «el mundo revelado». Las seis primeras sefirot de Zeir Anpín requieren la «plenitud» de los tres poderes mentales para su desarrollo y expresión, jojmáh-bináh-daat, pero Nukva de Zeir Anpín posee inicialmente un solo punto, el kéter de maljut, y por eso requiere la plenitud de las nueve sefirot adicionales.

[2] El Mundo de Atzilut es el Mundo de Emanación. Es la percepción exclusiva de la unidad Divina.

Sefirot | Emanaciones Divinas (11) Fundamento

En la entrega anterior:

Nétzaj también puede significar “conducir” u “orquestar” (como la palabra con la que empiezan muchos de los salmos de David, lamnatzéaj). De aquí que su conciencia es pragmática por naturaleza, como está reflejado en su correspondencia con la pierna derecha, la cual es el primer miembro del cuerpo supremo que “toca el suelo”.

Si nos visitas por primera vez, puedes recuperar la colección completa de artículos aquí.

Yesod es la novena de las diez sefirot, y el sexto de los atributos emotivos dentro de la Creación.

Aparece en la configuración de las sefirot en el eje central, directamente debajo de tiféret, y corresponde en el tzélem Elokim al órgano reproductivo (en el hombre; y el útero en la mujer).

Yesod es asociado en el alma con el poder de contactarse, conectarse y comunicarse con la realidad exterior (representada por la sefiráh de maljut). El fundamento (yesod) de un edificio es su inserción en el suelo, su unión con la tierra, (maljut).

Correspondiendo con el órgano reproductivo en el hombreyesod es el fundamento de las generaciones por venir. El poder de procrear, es la manifestación del infinto dentro del contexto finito de la criatura llamada ser humano. Cada hombre individual, es «pequeño» respecto de todas las generaciones que vendrán (de él). El yesod es conocido como el «pequeño órgano» del hombre, lo «pequeño que aferra lo grande [infinito]«. El yesod es el «pequeño» y «estrecho» puente entre el infinito potencial de procreación que fluye dentro de el, y su actual manifestación en la progenie humana.

Por esta razón, la sefiráh de yesod es identificada en la Toráh con el tzadik (el justo), como está dicho: «y el tzadik es el fundamento del mundo». En particular, esto se refiere al único, perfecto tzadik de la generación.

En el propio cuerpo del tzadik, finito y limitado en tiempo y espacio, se vuelven manifiestos la luz infinita y la fuerza vital creadora de Di-s. El tzadik procrea tanto en el plano espiritual, como también en el físico. Él experimenta procreación en el ojo interior de su conciencia, en el continuo flujo de nuevas ideas e innovaciones verdaderas en la Toráh. Él procrea despertando las almas de su generación, para que retornen a Di-s y la Toráh. Y eso es lo que dijo el rebe Shneur Zalman de Liadi, con respecto a la primera mitzváh de la Toráh –fructificad y multiplicaos–, el fundamento de la Toráh:

«Un judío debe hacer otro judío».

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Del Rav | Tu biShvat (2)

בס”ד

En la entrega anterior:

Tu bShvat, el 15 de shvat, es conmemorado en la tradición judía como una festividad especial, el “Año Nuevo del Arbol“. Es el día en que se determina el diezmo que va a ser tomado de los frutosrecién formados del árbol, porque se presume que en esta fecha ya ha caído la mayoría de laslluvias anuales.


Hay dos opiniones entre los sabios acerca de qué día de Shvat es el año nuevo del árbol. Beit Shamáy sostiene que es el primero, el día de la luna nueva, mientras que la Beit Hilel sostiene que es el 15, el de la luna llena.

Estas dos fechas corresponden a los dos estados del tzadik: el primero representa al tzadik como existe en un estado de «ocultamiento», mientras que el 15 representa al tzadik cuando está completamente revelado.

Esta distinción concuerda con la percepción general que la Casa de Shamáy decide de acuerdo con el estado potencial de la cosa, mientras que la de Hilel de acuerdo con su estado actual.

La Mishnáh se refiere a Tu bShvat como el año nuevo «del árbol» (en contraposición con la forma común «de los árboles»), aludiendo a la especial conexión entre esta fecha y «el Árbol [quintaesencial] de la Creación», el Árbol de la Vida.

Compuesto por raíces, tronco, ramas y fruto, el árbol es visto en Kabaláh como una metáfora del proceso por el cual la luz y energía Divinas son canalizados dentro de la Creación. Meditemos ahora acerca de los distintos componetes de la metáfora:

Las raíces representan el poder del alma del tzadik, que mientras absorbe y proyecta la fuerza invisible de vida Divina subyacente en la Creación y sirve como un modelo de servicio Divino, su esencia (o raíz del alma) permanece completamente oculta, como las raíces del árbol.

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Del Rav | Tu biShvat (1)

בס”ד

Nos enseña el Séfer Yetziráh que Di-s creó el mes de Shvat a través del canal divino de la letra tzádik.

Esta palabra significa «justo» (la persona), de quien está dicho: «El justo es es fundamento del mundo«, y en cada generación hay una persona que es el «justo de la generación«. El mes de shvat el tiempo más apropiado para que cada uno de nosotros manifieste su chispa de tzadik, fortaleciendo su conexión conciente con el tzadik de la generación.

La letra de tévet, del mes anterior, es la áin; cuando se conecta con la letra de este mes forman la palabra etz (árbol). Esto refuerza la idea, enseñada en jasidut, de que estos meses se corresponden respectivamente con el árbol del conocimiento y el árbol de la vida. El poder espiritual de tévet, bitul o autoanulación, intenta ayudarnos a rectificar el estado de autoconciencia que proviene del hecho de que Adam y Javáh hayan comido del árbol del conocimiento, provocando la caída primordial de toda la humanidad.

El poder espiritual de shvat, taanug o placer, intenta despertar nuestro deseo por el fruto del árbol de la vida, que tiene el poder de transformar la amarga oscuridad de la mortalidad que se produjo después de comer del árbol del conocimiento, en una dulce luz de vida eterna que se pretendía para el hombre en el momento de su creación.

El árbol de la vida, que expresa el potencial de restaurar la perfección en toda la realidad, aparece en las fuentes judías como un símbolo del «tzadik fundamento del mundo» y de la Toráh, en especial su dimensión interior, la tradición esotérica.

De esta manera, cuando nos concentramos en injertarnos en el árbol de la vida, el mes de shvat es un tiempo especialmente importante para apegarse al tzadik mediante el sendero de la «dulce» Toráh que emana de su boca. Por esta razón encontramos que fue durante este mes que los hijos de Israel escucharon la recapitulación de la Toráh por parte de Moisés, como está registrado en el libro Deuteronomio (Mishnáh Torá).

El justo es considerado como el Moisés de cada generación, anima nuestra alma al conectarnos a más y más profundos senderos de «la Toráh de Vida«, inspirándonos continuamente a diseminar la luz de Di-s en el mundo por medio de buenas acciones y compartiendo la sabiduría de la Toráh con la que hemos sido bendecidos.

Tu bShvat, el 15 de shvat, es conmemorado en la tradición judía como una festividad especial, el «Año Nuevo del Arbol«. Es el día en que se determina el diezmo que va a ser tomado de los frutos recién formados del árbol, porque se presume que en esta fecha ya ha caído la mayoría de las lluvias anuales. Este día celebramos el despertar de la vida, que la savia sube de las raíces y lleva las bendiciones y energía de la tierra a las ramas donde se forma el fruto.

Continuará…