Los momentos frescos del inicio de la semana equivalen a los primeros momentos del día: contienen pura energía. la utilizaremos para la reflexión y para la planificación de la semana. Además, los aprovecharemos para estudiar algo nuevo e inspirador.
Con lo cual, aprovechamos la ocasión para dirigir la palabra a nuestro rabino, en el famoso canal de «Las recamaras del rey» (Heijalót). El tema tratado es la igualdad.
Entre las personas conservadoras y las personas liberales ¿Que consideramos positivo y que damos por negativo? ¿Podríamos considerar una fusión entre estos distintos conceptos?
Este Shabát es la que sigue después de Tisháh beAv: Shabat Najamu, denominado así por la haftaráh que se lee esta semana. Leeremos la segunda parasháh de libro Devarím. Aquí, en el último libro de la Toráh se une punto humano y personal de Moshé con la locución divina. Se mencionan los acontecimientos importantes de nuestro pueblo, junto con la descripción de nuestra ley. En esta porción semanal, recibimos de nuevo los diez mandamientos de la Toráh, pero, primero, Moshé cuenta cómo suplica a D~os poder entrar en la tierra de Israel.
“וָאֶתְחַנַּן אֶל יְ־הֹוָ־ה בָּעֵת הַהִוא לֵאמֹר”
“En ese tiempo le supliqué a Dios” (Devarim, 3:23)
Moshéh tiene un fuerte deseo de entrar en la tierra prometida. Sin embargo, la palabra de D~os es firme y contundente.
«Sube a la cima del peñasco, y fija la mirada hacia el oeste, hacia el norte, hacia el sur y hacia el este. Que tus ojos se complazcan con ello, puesto que no cruzarás el Jordán» (Devarim, 3:27)
Miremos un poco la Parasháh. Por supuesto, reservamos la posibilidad de vista más profunda en la página siguiente: Deuteronomio 3:23-7:11
Moshé describe como suplicaba ante Di-s, ya que no podía entrar en la tierra prometida. Vuelve a recordar la historia del pueblo y la entrega de la Toráh. Se mencionan los diez mandamientos completamente. Se recuerdan los retos y las guerras que el pueblo superó, contra Og y Sijon. Se hace referencia al futuro establecimiento de las seis ciudades de refugio. Se declaran los fundamentos de la fe judía: la unicidad de Di-s, el precepto del amor a D~os, la enseñanza de la Toráh a los hijos, el deber de poner los Tefilin en el brazo y las Mezuzot en las puertas.
Esta semana, el video del rav habla de un versículo