La belleza de la Educación | Educación y Kabbalah

Estimad@s compañer@s de estudio,

¿Cual es la esencia de la educación? Cuando enseñamos algo, esperamos pasar una experiencia bella y fructifera para nuestro estudiante.  Todo ello, y mas, se esconde dentro de la palabra hebrea חינוך (Jinúj, Educación) Cuando miramos la primera silaba de la palabra Jinúj, nos fijamos que contiene la palabra Jen: Belleza. ¿Cuando la educación se convierte en algo bello? ¿cuando esta belleza es verdadera?

Una reflexión sobre la estética espiritual del concepto educativo, para educadores, y para tod@s.

Desde Lightletter.

OrEinSof.com

La “Belleza” de la Educación

Como vimos al comienzo, la raíz gramatical básica de jinuj aparece con más frecuencia en la Biblia con el sentido de “inauguración” e “iniciación” . También puede ser dividida en dos partes, jen que significa “gracia/belleza” y uj, un fragmento que no tiene significado propio pero sí en virtud de su valor numérico (guematria), 26, igual al del Nombre de Dios de cuatro letras, el Tetragramaron.

Basándonos en esta información etimológica, podemos ahora definir más precisamente el jinuj como el proceso de revelar la belleza latente y particular que Dios ha sembrado en cada alma. La medida del éxito de la educación se transforma entonces en el grado en que el educador puede extraer del alma esta gracia inherente, haciendo que esta comience a brillar en la vida del estudiante.

Torah_kids

El idioma hebreo tiene ocho sinónimos de belleza, enfatizando cada uno otra faceta diferente de esa evasiva y seductora cualidad.

Gracia, jen, es la estética de la simetría, ya sea en movimiento, forma o proporción. Es un estado de balance y armonía entre diferentes elementos, denotando un punto elevado y oculto de síntesis. El atractivo y encanto de la gracia proviene de su capacidad de sugerir unidad dentro de un estado de multiplicidad, por medio de la distribución balanceada de sus partes.

Pero la belleza no es intrínsecamente algo sagrado, sólo entra en la categoría de gracia verdadera si trae con ella una apreciación más profunda de Dios, ya que de otra manera permanece atada a lo externo, a lo físico, es un fin en si misma y es llamada gracia falsa (sheker hajen). Esta belleza ilusoria es la fealdad más grande, porque seduce a los seres humanos para que idolatren la vanidad y las apariencias en vez de la integridad y lo esencial. La clase de inspiración que es el punto de partida de un buen proceso educativo debe orientar los gustos de los estudiantes y sus pasiones hacia la belleza de la verdad y la santidad, fortaleciéndolos para resistir las tentaciones de los placeres e ideales falsos.

CONTINUARÁ

Los 5 sentidos y la Kabaláh | Kabalah y Educación

B»H

Queridas Lectores, Shalóm.

Os damos la segunda parte del ensayo «Desarrollo del gusto por la verdad». El tema que nos interesa en esta serie es el trabajo del profesor a través de una aproximación espiritual al labor educativo: Ademas de educar nuestras mentes, también debe ayudar a educar nuestros corazones.

En las entradas anteriores, nuestro Ráv demostraba la interesante comparación entre los cinco sentidos y la sensibilidad espiritual. En esta parte, nos centramos en el sentido del gusto y revisamos sus cualidades especiales.

Para volver a las entradas relacionadas, os proporcionamos los siguientes enlaces:

La clave para la iluminación espiritual (Primera parte)

La clave para la iluminación espiritual (Segunda parte)

Desarrollo del gusto por la verdad (primera parte)

Esperamos que os guste la lectura.

Desarrollo del gusto por la verdad

segunda parte

El Talmúd describe al mundo por venir como el en que Dios “removerá el sol de su envase”. Esto se refiere a una era en que la verdad y la luz espiritual de Dios iluminará el mundo con una intensidad incontenible, equivalente a la experiencia de la luz física en la superficie del sol. El crecimiento en nuestras vidas nos prepara para esta experiencia. El Talmúd dice que a aquellos que hayan adquirido un nivel de santidad en sus vidas se les dará el poder de resistir esta explosión abrasadora de revelación. Sus sensibilidades fortalecidas y refinadas les permitirá disfrutar de la tibieza solariega de esta experiencia de Dios que de otra manera sería un fuego consumidor.

Los sabios del Talmud nos aseguran que un día alcanzaremos este nivel de santidad, pero entre tanto permanece el problema de ¿cómo? Después de todo, obviamente estamos muy lejos de esto por ahora.

Estudio de Talmúd en polonia

Por supuesto, aquellos que han dedicado su vida al bien, perseguido la verdad y a Dios, ya están a un nivel de santidad y no requieren otros ajustes finales. Han pasado sus vidas preparándose para esta revelación irrefrenable de Divinidad y cuando llegue harán esta transición suavemente, con regocijo y abrazándola con sumo placer. Sólo han anhelado a Dios en sus vidas y ahora son capaces de experimentarLo sin la frustrante barrera de la grosera fisicalidad.

Los que se dedicaron a los placeres materiales y temporales, abandonando una relación con el bien según está definido en la Torá, no habrán realizado la tarea de refinarse y cultivar el gusto por la Divinidad. Como estas almas han rechazado o abandonado a la verdad en sus vidas, serán incapaces de disfrutar los placeres del Mundo por Venir (donde sólo existe la Luz de la Verdad Divina) hasta que su tosquedad e impureza sea purgada de ellos a través de sufrir la dura experiencia de la “vergüenza”. Esto es lo que se llama popularmente el “infierno”, la vergüenza abrazadora que siente una persona cuando “sus actos y declaraciones marchan delante de él y pregonan acerca de sus actos”.

Esta es la consecuencia que afrontamos luego de morir por no habernos dedicado en vida a la verdad como es revelada ahora. Esta purga, aunque momentáneamente es dolorosa, es en realidad una gran bendición porque transforma a los que pasan por ella, capacitándolos para apreciar los placeres espirituales del Mundo por Venir. Esto funciona como el proceso de refinación del oro. En ambos ejemplos, el mineral bruto se pone en un horno a una temperatura extrema hasta que todas las impurezas se transforman en cenizas y todo lo que queda son pepitas de oro puro.

CONTINUARÁ

Abraham como el Educador Modelo (1)

B»H

!Shalóm leculám!

nos alegre volver a escribirles e invitarles a la próxima lectura, que compagina conceptos de la Kabaláh con los de la educación. ya hemos comentado que hoy hablaremos de uno de los educadores mas importantes de toda la Toráh. durante esta revisión de la vida del patriarca, veremos cuales deben ser las virtudes que cada educador/líder, tiene que desarrollar a lo largo de su trayectoria.

Esperamos que os guste la lectura. 

Lightletter y el equipo de OrEinSof.com

Abraham como el Educador Modelo

De todas las personalidades de la Biblia, Abraham es considerado el educador arquetípico cuya vida es un modelo de los ideales de inspiración e integración.

Para comenzar, Abraham personifica las cualidades de iniciador, ya que reveló un nuevo nivel de conciencia y, como resultado, se convirtió en el progenitor de un nuevo “pueblo”, los judíos. Es asociado con la plegaria de la mañana, que es recitada en el momento del día en que es más palpable la re-creación, el tiempo de una luz nueva (el amanecer) y un nuevo estado de conciencia (el despertar).

La primera aparición en la Torá de la raíz gramatical de «jinuj«, que hemos definido como iniciación/inspiración, es en relación con actos que realizó Abraham, cuando lideró una fuerza formada por sus educandos (janijav) para rescatar a su sobrino Lot.

También es el epítome de integración, que en hebreo hemos definido como hadrajá, cuya raíz es la palabra derej, que significa “camino”, usado en La Torá en relación a Abraham en un contexto muy revelador. Di-s explica por qué eligió a Abraham:

“Abraham se volverá una nación grande y poderosa y por él serán bendecidas todas las naciones del mundo. Yo le di un presente especial porque instruyó a sus hijos y a su familia en su camino, y guardará el camino [derej] de Di-s haciendo caridad y justicia.”

Di-s señala aquí que lo que distinguió a Abraham de las otras almas era su compromiso y capacidad para guiar a otros por los caminos de Di-s.

Abraham es llamado por los sabios la “fortaleza de ser” (eitán), porque él es la piedra basal, fundamento del pueblo judío. Fue el primero en reconocer la unidad de Di-s en el nivel más profundo posible: no sólo que Di-s es el Creador y nada existe sin que así sea Su voluntad, no sólo que El es la Fuerza de Vida que permea toda la creación, mantiene toda vida y nada puede existir sin su aporte permanente de energía, sino que, más aún, no hay nada aparte de El y nada existe excepto El. (nuestra experiencia sensorial de la “realidad” es una ficción temporaria, que no tiene existencia real o independiente en relación a Di-s.)

CONTINUARÁ

Para acceder a la continuación, pulse aqui

Kabaláh y educación | El Poder de Renovar y la Fuerza de Perdurar (2)

Seguidores de nuestra enseñanza semanal, Shalóm.

Hoy, cerramos los conceptos de los cuales hablabamos el dáa lunes. Para los que quieren acceder a la primera parte, pueden encontrarla con este enlace

Para los que están listos a seguir ya, os deseamos un estudio fructífero. Esperamos que puedan recibir de la sabiduría del Rav, para beneficiarse y beneficiar a los demás, a sus familias y comunidades. 

En la entrada Anterior:

El estado de iniciación/inspiración se afirma y expresa a través del tiempo como un sentido continuo de renacimiento y renovación: “cada día debe ser a tus ojos como un nuevo comienzo”. La cabalá enseña que el secreto de la longevidad es la habilidad de reconocer cada momento como una creación original.

Un educador debe adiestrar a sus estudiantes para que corroboren esta verdad en tres niveles diferentes de la realidad:

1. a nivel del mundo

2. a nivel personal

3. a nivel de la Torá

El Poder de Renovar y la Fuerza de Perdurar (2)

En el nivel del ser, el maestro requiere de sus estudiantes que experiementen el renacimiento continuo de su propio ser y se regocijen con el despliegue de las infinitas posibilidades de crecimiento personal y espiritual que se presentan en cada momento. Cada instante ofrece el desafío y la oportunidad de escoger el bien. A través de este privilegio de elegir que los seres humanos transforman sus vidas en vehículos de Divinidad.

En el nivel de la Torá, el maestro quiere que sus estudiante experimenten nuevamente la revelación de la Torá, de acuerdo con las necesidades del estudiante y en concordancia con esas verdades y símbolos que le son más relevantes en ese momento. Por eso es posible leer la misma Torá semana trás semana, año trás año, una y otra vez y extraer una comprensión nueva y oportuna que “por coincidencia” se aplica al problema o asunto que tenemos entre manos.

Estos tres niveles de percepción se relacionan entre si. Como parte de un universo recreado continuamente todos participan en su renovación progresiva. A su vez, esto inspira un sentido de juventud y entusiasmo perpetuo que colorea cada experiencia, particularmente en relación con la ley de Di-s tal como está expresada en la Torá.

Los sabios enseñan que “la Torá es revelada nuevamente cada día”, pero si somos rígidos y rancios, fatigados y cansados de la vida, no podemos apreciar su frescura. ¿Cómo podemos, aquellos que estudiamos el mismo tema año tras año, mantener un sentido de vien nuestro aprendizaje? Podemos, pero sólo si comprendemos que cada día nos volvemos personas diferentes, con nuevas necesidades e interrogantes más profundos.

Así probamos y descubrimos las dimensiones de la Torá que pueden satisfacer a este nuevo “ser”. Esto requiere de nosotros leer nuevos materiales que no hayamos estudiado previamente, como también descubrir profundidades adicionales en lo que ya nos es familiar. Di-s revela Su Torá una y otra vez, día trás día, centuria trás centuria y también nosotros debemos renovarnos continuamente para apreciar la verdad única y singular de cada momento.

Esperamos que os ha gustado, volveremos en la proxima semana con enseñanza interesante sobre Abrahám avinú y su forma de educar

Yom tov

Lightletter y el equipo de OrEinSof

Kabaláh y educación | El Poder de Renovar y la Fuerza de Perdurar (1)

B»H

Shalom a nuestros seguidores y seguidoras, en la continuación de nuestra serie semanal, sigamos con el planteamiento educativo.

¿como puede el educador insertar contenido espiritual en la clase?

¿como las nociones estudiados en cualquier temario estudiado en la escuela, pueden reflejar sabiduría infinita, y demostrarnos otra cara de la Toráh?

Aquí damos un paso mas para descubrir las respuestas a estas preguntas, Invitamos a todos los interesad@s acompañarnos en nuestro trayecto educativo.

Lightletter, OrEinSof.com

El Poder de Renovar y la Fuerza de Perdurar

Hasta ahora hemos discutido acerca de la inspiración y la integración como dos etapas separadas y consecutivas en el proceso de la educación. Esta simplificación algo exagerada fue necesaria para comunicar el carácter único de cada una y presentar el modelo básico de su interacción. En realidad, cada una es un proceso progresivo por si misma. Pueden verse como temas paralelos que forman juntos la columna vertebral de la educación y el desarrollo del carácter.

El estado de iniciación/inspiración se afirma y expresa a través del tiempo como un sentido continuo de renacimiento y renovación: “cada día debe ser a tus ojos como un nuevo comienzo”. La cabalá enseña que el secreto de la longevidad es la habilidad de reconocer cada momento como una creación original.

Un educador debe adiestrar a sus estudiantes para que corroboren esta verdad en tres niveles diferentes de la realidad:

1. a nivel del mundo

2. a nivel personal

3. a nivel de la Torá

A nivel del mundo el maestro busca que sus estudiantes estén permanentemente conscientes de la renovación continua del universo; sensibilizándolos a la luz y el amor de Di-s que irradia desde lo alto y re-crea todo el universo, desde la nada absoluta, en cada instante.

¿Cómo pueden creer los estudiantes (y mucho menos verificar) una noción como esta, especialmente porque aparentemente no tiene ninguna relación con la experiencia diaria?

earth-cd321c592915ddb9165e20d1053edce9ee78cd3b-s6-c10

1_115304_1

Una vez que comienzan a estudiar realmente el mundo que los rodea y extienden sus leyes para abarcar la totalidad de la creación, confirman al menos la posibilidad de la existencia de tal premisa. Ven que el universo necesita un suministro constante de energía para mantener su existencia, de la misma manera que una lamparilla electrica necesita un flujo continuo de electricidad para mantener su incandescencia. No obstante, aquí termina la comparación, porque cuando se jala de la perilla y la electricidad cesa de fluir, el bulbo continúa existiendo, la única diferencia es que ya no brilla.

La dependencia de su Creador que tiene la creación es más profunda que esto. Si Di-s desconectara el enchufe no sólamente todo dejaría de brillar sino que también dejaría de existir. La creación entera, no sólo su energía y su fuerza, depende permanente y completamente del deseo de Di-s, renovado constantemente, de que siga existiendo.

Este nivel del mundo es el más importante por fijar el escenario de los otros dos.

CONTINUARÁ