Parashiot | Shmot y Vaerá 5772

בס”ד

Querid@s amigos y amigas de OrEinSof.com,

Shavúa tov. Aunque durante dos fines de semana no pudimos presentaros los vídeomensajes del rav Ginsburgh, relacionados con las porciones de la Toráh que leíamos; no queremos dejaros sin la oportunidad de conocer las reflexiones de nuestro maestro… aunque sea algo tarde. Igualmente podemos aprender muchas cosas interesantes de estas parashiot. Así pues, si disponéis de tiempo, tenéis aquí Shmot y Vaerá.

Las transcripciones están copiadas en el campo de comentarios, caso que os facilite el estudio.

Shmot 5772 | Nace el Redentor de Israel 

Shmot es la parashá con la que empieza el libro homónimo, y va de los psukim 1:1 al 6:1.

Los Bnei Yisrael se multiplican en Egipto. «Amenazado» por la creciente cantidad de israelitas, el faraón los esclaviza y ordena a las parteras hebreas Shifra y Pua, matar a todos los varones que nazcan. Cuando ellas no cumplen, paró manda a su propia gente a arrojar a los bebés hebreos al Nilo. A partir de aquí, empieza una historia que bien conocemos.

Ahora bien, la Toráh nos cuenta que la madre, Yojévet, mira a su bebé Moshéh recién nacido, y «ella vio que era ‘bueno’ y lo escondió por tres meses».

El hecho de que el primer término descriptivo usado para Moshéh rabenu es que es «bueno», debe ser algo esencial de su ser, para el núcleo del ser del redentor de Israel. En forma breve, el vídeocomentario del rav Ginsburgh explicará 7 significados diferentes que los sabios han dado sobre a qué se refiere la palabra «bueno» en el nacimiento de Moshé Rabeinu.

Vaerá 5772 | Sumisión, Separación, Dulcificación 

Vaerá está en el libro de Shmot 6:2 – 9:35

Di-s se revela a Moshéh. Utilizando las cuatro expresiones de redención, Él promete sacar a los Hijos de Israel de Mitzráyim, redimirlos de su servidumbre, para después adquirirlos como Su pueblo elegido en el Monte Sinay; luego Él los llevaría a la tierra que le prometió a los patriarcas como su eterno legado.

En esta parasháh leemos el comienzo de las primeras siete de las diez plagas. El concepto 10 es muy, muy importante en la Toráh. Incluso estudiamos que «todos los décimos son sagrados». Cuando decimos que hay 10 cosas ¿a qué nos referimos normalmente en el contexto de la Toráh? Cuando una persona medita, identifica 10 con los Diez Mandamientos, que es el 10 más importante en la Toráh. Los Diez Mandamientos fueron entregados a Israel en el momento culminante del éxodo de Egipto. Eso será en unas semanas más, en la parashá Yitró que comentaremos en su momento.

Esperamos que hayáis pasado un buen Shabat, en paz, armonía y equilibrio con nuestra dimensión interior. Os deseamos una positiva semana.

bShalom,
Edit Or

2 comentarios el “Parashiot | Shmot y Vaerá 5772

  1. Transcripción de Shmot:

    Parashá que leemos esta semana de la Torá es Shemot, la primera del libro de Éxodo. Una de las cosas más importantes de esta parashá es el nacimiento del redentor de Israel, Moshé Rabeinu, quien aparece en la Tor á por primera vez en la parashá de esta sema

    Su madre Iojeved lo da a luz en secreto pues el faraón ha decretado que todos los infantes deben ser arrojados al Nilo, así que todo se mantuvo en secreto y cuando nace su hijo, Moshé Rabeinu, mira al bebé recién nacido y dice en hebreo (que) ella vio que era “bueno” y lo escondió por tres meses .

    Los comentaristas dicen que toda madre ama a su hijo, y que al ver a su recién nacido, inmediatamente lo abraza y sabe sin lugar a dudas que su hijo es bueno y que es el mejor regalo que Dios le ha dado. Entonces, ¿Qué es lo que la Torá quiere decirnos al enfatizar la palabra “bueno”, “ que ella vio que él era bueno ”? Debe haber un significado especial, algún significado único de la palabra “bueno” en este contexto del nacimiento de Moshé Rabeinu.

    En realidad hay una gran variedad de comentarios diferentes, distintos significados de qu é es lo bueno de Moshé Rabeinu. Tomando en cuenta que es el redentor de Israel, fue el primer redentor y su alma regresa para ser el redentor final, el Mashíaj. Así, todo lo que se dice de él es muy pertinente para nuestra comprensión, para nuestra conexión con el redentor de Israel.

    El hecho de que el primer término descriptivo usado para él es que es “bueno”, debe ser algo esencial de su ser, para el núcleo del ser del redentor de Israel, Moshé Rabeinu. En forma breve vamos a ver 7 significados diferentes que los sabios han dado sobre a qué se refiere la palabra “bueno” en el nacimiento de Moshé Rabeinu.

    Y así como hacemos usualmente, cuando discutimos una serie completa de comentarios sobre cierto tópico, tratamos de ordenarlo, de modelarlo basados en un modelo cabalístico, y si hay siete diferentes interpretaciones, deben corresponder a los siete poderes emotivos del corazón que son en hebreo: Jesed , Guevurá , Tiferet , Netzaj , Hod , Iesod y Maljut , y la traducción al castellano es generalmente: bondad, poder (rigor), belleza, victoria, reconocimiento, fundamento y reinado.

    Veamos cómo los sabios dan 7 interpretaciones a la palabra “bueno” al nacimiento de Moshé, y la manera en que se corresponden con su carácter emotivo.

    PRIMERA INTERPRETACIÓN

    La primera interpretación es la que Rashi nos trae, (es el que hace el comentario más literal del Jumash , de la Biblia) nos dice que “bueno” se refiere a la primera vez que “bueno” fue mencionado en la Torá. Al principio de la creación, se dice que la primera cosa que Dios creó fue la luz en el primer día. El primer día de la creación corresponde a la primera de las siete emociones que es la bondad, “ y creó la luz y observó la luz y vio que era buena ”.

    Por eso es muy similar, así como cuando Dios creó la luz, miró la luz y vio que era buena, exactamente del mismo modo, Iojeved, la madre de Moshé Rabeinu, dio a luz a Moshé, lo miró y vio que era bueno.

    Entonces, debe haber alguna relación entre el nacimiento de Moshé y la aparición de la nueva luz creada. Los sabios dicen que, efectivamente, al momento de su nacimiento, cuando salió del vientre materno, toda la habitación se llenó de luz. Esta es la primera interpretación: el hecho de que ella vio que él era “bueno” significa que la luz llenó, abarcó todo el espacio alrededor de Moshé Rabeinu.

    Y ya que esta interpretación se deriva de la comparación de su nacimiento al primer día de la creación, que es Jesed , la primera luz en aparecer es su amor y bondad esenciales, su midá , su carácter de Jesed .

    LA SEGUNDA INTERPRETACIÓN

    La segunda interpretación dice que sabemos que Moshé Rabeinu nace al séptimo mes, mejor dicho, al inicio del séptimo mes de embarazo, seis meses y un día. Una madre que da a luz a un bebé prematuramente podría haberse producido un aborto, si el bebé no hubiese estado completamente formado. También dice que era una mujer muy anciana entonces –pocos saben que tenía 130 años de edad– y de acuerdo a la naturaleza, una mujer ya entrada en años, muy a menudo da a luz a un bebé débil. Pero cuando miró a su bebé, Moshé Rabeinu, no solamente estaba completo, sino que también parecía estar fuerte.

    Esta es en realidad la interpretación del Tárgum Ionathan, una de las traducciones al arameo del texto, que aunque había nacido prematuramente y de una madre muy anciana, estaba completo y era fuerte, y ese hecho es el significado de la palabra “bueno,” (que) vio que era “bueno”, que estaba completo, completamente formado, bien formado y muy fuerte, casi como un niño crecido.

    Esta interpretación corresponde a poder, puesto que la palabra que utiliza es “fortaleza”, ella vio que era fuerte, hay algo acerca de la palabra “bueno” que da idea de que la persona es fuerte. Para ser “bueno” debes ser fuerte.

    LA TERCERA INTERPRETACIÓN

    La siguiente, que se asemeja a la anterior pero es una interpretación diferente, es que muy a menudo la palabra “bueno” en hebreo, en el Tanaj y en la Torá significa bello.

    Por ejemplo cuando la Torá describe a Rivká también cuando era una niña a la edad de tres años, antes de que desposara a Itzjak, la Torá usa la palabra tová, que tenia buena apariencia, así que mucho de los comentarios dicen que Moshé era simplemente el más bello de todos los niños, aunque, como ya habíamos dicho, toda madre ama a su hijo, pero hay una belleza especial en este niño que ninguna otra madre ha experimentado al ver a un recién nacido.

    Esta es obviamente la interpretación de que “bueno” en este contexto significa “bello”, lo cual corresponde a la tercera sefirá emotiva, Tiferet .

    LAS INTERPRETACIONES CUARTA Y QUINTA

    Las siguientes dos sefirot , Netzaj y Hod , normalmente van juntas como pareja, y sólo para explicar en breve cual es la diferencia entre éstas dos y las tres anteriores, digamos que: las tres anteriores son esenciales a nuestra personalidad o carácter. Decir que alguien es “bueno” significa que hay algo bueno innato en esa persona, que sea “bueno” como “lleno de luz,” o que es fuerte, o hermoso, todos éstos son atributos que le describen. Pero cuando llegamos a las siguientes dos sefirot , Netzaj o Hod , son más pragmáticas, es decir que si alguien es “bueno” a nivel de Nétzaj o Hod –victoria y reconocimiento– significa que es bueno para algo, algo que es capaz de realizar, que puede alcanzar y lograr, y para cierta función para la cual es bueno.

    Así que en realidad, ahora tenemos dos nuevas interpretaciones que van juntas como un par. Dicen los sabios era bueno para ser profeta . Ella tuvo una sensación -las madres son intuitivas- vio a su recién nacido y dijo: “ este bebé es bueno para ser profeta ”. ¿Cuál es la profecía de Moshé Rabeinu? Él es el niño a través del cual recibimos la Torá, la mayor profecía de todas.

    Hay otra interpretación, ella vio a su bebé y dijo: “ Él es bueno para ser el redentor del pueblo judío ”. Los sabios dicen en un contexto diferente que Moshé Rabeinu es llamado “bueno”. Hay una hermosa expresión que dice: “ Que lo bueno venga y reciba lo bueno del Bueno para el bueno.” “ Que lo bueno venga ” es Moshé, llamado “bueno” cuando nació, “ y reciba lo bueno, ” la Torá, su profecía, la Torá es llamada “bueno”, “ del Bueno ”, Dios es el autor de la Torá, Él es el bien absoluto, “ para el bueno, ” al pueblo judío también se le llama “bueno”.

    Así que ésta es como un extenso juego de palabras que dicen los sabios, “ Que lo bueno venga y reciba lo bueno del Bueno para el bueno”. Todo esto tiene que ver con la propiedad de Nétzaj de Moshé Rabeinu, pues en la Cabalá se dice que la profecía viene de ésta sefirá , de este poder emotivo de victoria. Victoria también significa “eternidad”, la Torá es la palabra y enseñanza eterna de Dios.

    La correspondiente con Hod: así como Moshé Rabeinu nos entregó la Torá, es bueno, veo que es bueno para ser profeta, veo que es bueno para ser el redentor de Israel ” ¿Cómo se que “bueno” se refiere a “redentor”? “Redentor” significa que sacas a alguien del cautiverio, como el pueblo judío esclavo del faraón de Egipto. En Cabalá se nos enseña “el cautiverio vs. la libertad” es propiedad de Hod , de ésta quinta sefirá . Ya sea una persona libre o cautiva, Moshé es capaz de tomar esa alma, nuestras almas que están en cautiverio físico o espiritual, y es capaz de redimirnos de nuestro cautiverio. Ésta es la propiedad de Hod en Cabalá. ¿Cómo sé que es llamada “bondad”? Porque en el libro de Ruth, (el rollo de Ruth) al redentor se le llama “bueno”. La palabra “bueno” es utilizada como el nombre del redentor: él es bueno para ser profeta, es bueno para ser el redentor .

    En realidad, el faraón mismo sabía que ese era el día, su astrólogo le dijo que era el día en habría de nacer el redentor de Israel. Esto también hace que corresponda a Hod , pues hasta en el otro lado –el lado malvado, perverso– el faraón se dio cuenta que este día, este buen día, era el mejor día para que nazca el redentor de Israel.

    Obviamente eso estaba “en las noticias” porque también ella tenía miedo, todos temían el decreto del faraón. Todos sabían que el astrologo dijo que este era el día en el que el redentor de Israel nacería, y cuando vio a su recién nacido dijo: “ Éste es el redentor de Israel, él será el redentor de Israel .”

    LA SEXTA INTERPRETACIÓN

    El siguiente comentario es Iesod , el fundamento. El fundamento en la Cabalá así como en la parte revelada de la Torá tiene que ver con el birt milá , la circuncisión. De hecho se dice que Moshé Rabeinu nació circunciso. Y ya que nació circuncidado, ser “circunciso” es su bondad esencial pues acerca de un Tzadik que es circuncidado se dice: amrú tzadik kitov “digan al justo que es bueno”. También quiere decir que él es bueno, su naturaleza es buena, no tiene bajas pasiones, el estar circuncidado significa que es muy puro en sus deseos que en caso contrario serían animales, ya sea los referentes a la comida o los sexuales. Él es una “buena” persona, el es bueno en su esencia y en su fundamento. En su fundamento es bueno, y eso es «bueno» en Iesod.

    El último es Maljut. Y en Cabalá Maljut es nuestro nombre. Por eso dicen los sabios que esta palabra «bueno», que aparece en el nacimiento
    de Moshé Rabeinu también se refiere a su nombre. Y la hija, la princesa de Egipto, Batia la hija del Faraón lo llamó Moshé. Pero antes de recibir el nombre Moshé, el nombre original que le dio su madre fue «Tov», «bueno». Nuestro nombre es cómo uno se presenta a los demás,
    Cómo se dirigen a uno y cómo es llamado por la sociedad que lo rodea. Eso es Maljut. Nuestro nombre es nuestro Reinado. El el reino de Moshé Rabeinu, él reino por su nombre, «bueno», la esencia de lo bueno.
    Entonces este es el esquema explicado en forma breve de las 7 interpretaciones diferentes del significado de la palabra «bueno» en el contexto del nacimiento de Moshé Rabeinu. y esto es realmente el retrato completo del carácter de su corazón. Los 7 atributos son los 7 atributos del corazón

    Así, que seamos meritorios del Moshé Rabeinu de esta generación, con todos estos atributos. Cuando pensemos en ellos tenemos que tratar de manifestar estos atributos también en nosotros mismos. Porque cada uno, está dicho, tiene una chispa de Moshé Rabeinu en su interior.
    Quizás Moshé Rabeinu ha de nacer esta semana, esta misma semana.

  2. Transcripción de Vaerá:

    En la parashá de esta semana tenemos el comienzo de las primeras siete de las diez plagas. El concepto 10 es muy, muy importante en la Torá. Incluso estudiamos que “todos los décimos son sagrados”. Cuando decimos que hay 10 cosas ¿a qué nos referimos normalmente en el contexto de la Torá? Cuando una persona medita, identifica a 10 con los Diez Mandamientos, que es el 10 más importante en la Torá. Los Diez Mandamientos fueron entregados a Israel en el momento culminante del éxodo de Egipto. Eso será en tres semanas más, en la parashá Itró cuando fueron dados a Israel los Diez Mandamientos.
    Muchas personas se identificarán, en el contexto del 10 de la Torá con las 10 Aserciones de la Creación. Cuando Dios creó el mundo dijo: “que haya luz, que haya un firmamento, y todo lo demás que son las diez aserciones de la creación. En realidad, la primera según los sabios está implícita, no explícita, porque en la primera palabra Bereshit , no está explícitamente dicho “Y dijo Dios”, pero esa palabra “en el principio creó Dios los cielos y la tierra”, es también una aserción implícita que después es seguida por otras nueve aserciones explícitas que dicen: “Y dijo Dios… esto y esto”.

    Entonces, el mundo fue creado a través de Diez Aserciones, como tenemos en el Pirkei Avot, Las Enseñanzas de Nuestros Padres, la Torá nos ha dado Diez Mandamientos. Y ahora tenemos que tener en cuenta algo muy importante que todo el mundo conoce, pero no es entendido reconocidamente que el relato de las Diez Plagas es en realidad intermediario. Siempre que tenemos dos conjuntos o conceptos extremos, debemos tener algo que los conecte. Entonces de alguna forma muy misteriosa las diez plagas en Egipto, que fueron la preparación y lo que en realidad nos capacitó para salir de Egipto, tal como lo dice la Torá y los sabios dicen que en cada plaga había naguf verafuna, golpeemos y curemos, naguf a Mitzraim y rafona a Israel, con cada plaga que golpeó a los egipcios. Dios curó la enfermedad del alma del pueblo de Israel, y lo dejó preparado para dejar la mentalidad de esclavos y volverse un pueblo judío independiente y liberado.

    Entonces, decíamos que las diez plagas, de alguna manera muy profunda son intermediarias entre las Diez Aserciones de la Creación y los Diez Mandamientos en la entrega de la Torá.

    ¿Cómo entendemos esto? Con las Diez Aserciones de la Creación Dios está creando la naturaleza. El Baal Shem Tov nos enseñó que meditar, contemplar las maravillas de la naturaleza, uno de los propósitos es que nosotros mismos somos almas, y que somos seres humanos, y que estamos muy alto en la escala de los distintos reinos de la creación: el reino mineral, el reino vegetal, reino animal y los seres humanos. Pero a través de meditar acerca de las maravillas en la creación del mundo, se supone que debemos alcanzar un estado de calidad existencial de la que el Baal Shem Tov decía: “yo”, ser humano y la hormiga o la planta, o todo lo que llega a existir en la creación, todos estamos exactamente en el mismo nivel, todos fuimos creados por Dios con un propósito, el propósito universal de servir a Dios.

    Cada uno, cada parte de la creación sirve a Dios basados con su mejor capacidad, y en cierta manera como somos seres humanos que tenemos libre albedrío, podemos ser peores que las hormigas o las plantas o la roca, porque ellos nunca van en contra de la voluntad del Creador. Pero nosotros tenemos la libre elección de ir en contra de la voluntad del Creador.

    Entonces nuevamente, el servicio de meditar acerca de las 10 Aserciones de la Creación es alcanzar un estado de humildad, que en hebreo es llamado hajnaá, “sumisión” al Creador. Porque a pesar de que en realidad hay muchas cosas que fueron creadas pero hay un común denominador, todos fueron creados lijvodó, en Su honor, para glorificar u honrar al Creador. En ese sentido somos todos iguales, incluso está dicho por los sabios que el hombre fue creado último, y en cierto sentido es el nivel más inferior de la creación, porque la causa es creada para lo que viene después, y la causa siempre es más elevada que lo que causó. Y como lo que fueron creadas primero son la causa de lo que fue creado después, y la causa siempre es más elevada que aquello que causó.
    Entonces, algunas veces decimos que los seis días de la creación son como una escalera ascendente de formas orgánicas o incluso inorgánicas. Pero en cierto sentido también es un orden descendente.

    ¿Qué sucede con los 10 Mandamientos cuando vamos hacia el extremo superior? Los 10 Mandamientos son la absoluta revelación de Dios en el contexto de esta creación. Los 10 Mandamientos comienzan con la palabra “anojí”, “yo”: “Yo soy Dios, tu Dios, Quien te sacó de la tierra de Egipto, tierra de esclavitud…”. Todo es una revelación de “Anoji”, que los sabios leen “Anoji mishe Anoji”, “Yo soy el que soy”, la esencia de Dios. Los mandamientos nos fueron entregados para cumplirlos, para hacer, pero son una revelación Divina. Cuando la Torá fue entregada a Israel los Cielos fueron abiertos y Dios mismo se reveló. Obviamente no es la revelación de las diez plagas, y ciertamente tampoco la revelación de las diez Aserciones de la Creación.

    ¿Qué hacen estas diez plagas en el medio? Las diez plagas vienen a crear una separación, havdala. Dijimos al meditar sobre los secretos de la creación, que en cierto sentido todo en el mundo es igual, todo está a un mismo nivel. Las diez plagas, es la primera vez en la historia que Dios muestra al mundo que existe una distinción entre las almas. Que es correcto tomar las almas egipcias que en cierto sentido son una expresión de lo negativo en el mundo, y golpear esa negatividad con el fin de curar el alma Divina positiva Israel, para crear la entidad judía. Eso en Cabalá es llamado havdalá, “separación”, que sigue a la “sumisión”.

    La absoluta revelación de Dios es llamada hamtaká, “dulcificación”. El Baal Shem Tov, el fundador del Jasidut dice que todo proceso espiritual verdadero, debe pasar a través de tres fases: la primera es sumisión, la segunda es separación y la tercera es la dulcificación. En hebreo hajnaá-sumisión, havdalá-separación, hamtaká- dulcificación. La separación siempre es una fase intermedia entre la fase de sumisión y la fase de dulcificación. Cuando Dios se revela toda la realidad se vuelve dulce.

    Una vez más, aquí se explica que todos somos como pequeñas hormigas para Dios, no existe diferencia alguna entre las criaturas, todas tienen el mismo Creador, y nuestro propósito es cumplir Su voluntad de igual manera. Pero el hecho de que hay separación entre las almas, es una novedad, es algo nuevo, pero es una novedad necesaria con el fin de alcanzar automáticamente la dulcificación de los Diez Mandamientos, la entrega de la Torá a Israel.

    Así, en la forma en que son comprendidos los tres 10: las diez Aserciones de la creación, las diez plagas y finalmente los diez Mandamientos, es uno de los modelos más importantes en toda la Torá, el proceso que el Baal Shem Tov llamó: Sumisión, Separación y Dulcificación.

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